- TOCARNOS: Tocar, conectar, acariciar, masajear... Hasta donde tú quieras y (sólo) en el momento que quieras. Pero se ha demostrado que tocarnos físicamente desestresa y reduce la producción de cortisol (que tan mal nos hace sentir, especialmente en las situaciones de conflicto)
- AROMAS: Llena tu casa aromas, hasta su justa medida. Mantén el sentido despierto cuando paseas por el campo, la playa, parques o jardines. Cuando pasas junto a un horno o una floristería...
- ESCUCHA: La música que te gusta, los sonidos de la naturaleza, la voz de tus personas amadas...
- MUÉVETE: Haz ejercicio (el apropiado para ti y hasta donde te sientas bien) y disfruta del subidón de adrenalina y endorfinas. Es una fiesta de hormonas que genera felicidad en tu interior. ¡Pruébalo!
- JUEGA: La vida es un juego, juega más. Disfruta. No te enganches rumiando los pequeños tropiezos de la vida hasta convertirlos en montañas amenazantes. Todo pasa.
- TÓMATE EL HUMOR EN SERIO: No existe prácticamente nada que no tenga una cara divertida. Mira la vida con los ojos de una persona que se divierte. Ése eres tú.
- RÍETE: A solas o en compañía. Las risas compartidas establecen y desarrollan unos vínculos entre las personas como pocas otras experiencias.
- QUEDA PARA COMER: Compartir una charla y un plato (y un vino, si se da el caso) en torno a una mesa con una amiga o amigo, puede ser también una experiencia de plenitud emocional y física. Queda para comer y comparte.
martes, 28 de junio de 2011
LA BOUTIQUE DE TU BIENESTAR PERSONAL
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